La Vista de la Verdad
- Adriano Leon
- 16 mar 2017
- 2 Min. de lectura

En el mundo ajetreado que vivimos hoy, sumergidos en un remolino de informacion alrededor de nosotros; es facil evitar las injustas realidades detrás de los productos que consumimos y que de manera inadvertida
Primero comencemos con algo que esta en nuestras propias narices. Cuando entramos a comprarnos unos lentes de lectura, de cualquier tienda (sea Optica Lopez), no te preguntas porque un pedazo de plastico con aluminio llega a costar desde $100 hasta $200, incluso mas de su precio para manufacturar que llega a ser $20. La verdad es que el 80% del mercado de lentes es controlado por una sola compañía, que se enmascara de las diferentes marcas y es producido en un solo lugar. Prada, Chanel, Dolce & Gabbana…todas estas marcas con nombres diferentes pero con el mismo productor, Luxottica. No importa que optometrista utilices, esta compañía estara ahí; y sus 1.2 billones de ganancias en euros tambien.
Incluso aunque no lo notamos, muchos de nuestros productos que tenemos en tiendas llegan a ser producidas por en el mismo lugar.
Al comprar, siempre debatimos cuales son los mejores productos por su precio, esto aplica a la tecnologia en nuestras manos. Las laptops que tienen al frente de ustedes sean Apple o Windows, probablemente vienen de la misma compañía: Quanta. Esta compañía de origen Taiwanes produce el 33% de las computadoras portatiles del mundo, y mientras tu compañía favorita incrementa los precios vendiendote la ilusion de “calidad” al comprar de su empresa.
Ahora nos movemos a nuestras mesas, especificamente la mayoria de los productos que comemos. Cuando tomamos en cuenta la produccion de los alimentos, debemos tener en cuenta que casi todos los productos importados son geneticamente modificados, y estos vienen de una mega transnacional, Monsanto. Esta mega compañía controla la produccion y manipulacion de los productos que nos vamos a la mesa. Estos tambien controlan los pesticidas y los ingredientes de las gaseosas y la mayoria de los productos de constuccion.
Ahora saben sobre las monopolias detrás de las marcas, que controlan la economia mundial, ya que con el dinero y como consumidores, votamos por su existencia y por nuestra realidad.
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